Según datos de la OMS, el 5% de la población global padece de algún tipo de discapacidad auditiva. Sin embargo, a pesar de contar con este conocimiento, la información y educación relacionada con la salud y el cuidado del oído sigue siendo muy escaza.
Si crees tener algún tipo de deficiencia auditiva es importante que tomes en cuenta que cada caso es diferente, y para cada situación existe un tipo de solución distinta.
Nivel de audición: Test de audiometría en una tienda de audífonos con cabina
Así como nuestros familiares nos heredan el color de sus ojos, sus lunares y hasta el tamaño de la nariz, los problemas auditivos también pueden ser genéticos.
Por ejemplo, una enfermedad congénita relacionada con la deficiencia auditiva es el Síndrome de Pendred. Un trastorno de la hormona tiroidea que afecta directamente el desarrollo de los huesos internos del oído. Si el problema es grave, es posible que deba obtener un implante coclear.
Generalmente, las primeras señales se detectan en la infancia. Por ejemplo, los indicativos del Síndrome de Usher comienzan desde el nacimiento y empeoran conforme pasa el tiempo. Se caracteriza no solo por causar problemas auditivos sino también visuales. Hay pacientes que han perdido hasta el 100% de su audición antes de los 20 años.
Pero además de causas congénitas, los estragos de la edad juegan un papel muy importante. Se dice que una de cada tres personas de 65 a 74 años padece de problemas de audición.
Sin embargo, tener un problema auditivo (congénito o no), no quiere decir que perderás por completo el sentido del oído, pues existen diferentes niveles de sordera (hipoacusia) y procedimientos específicos para cada uno de ellos.
Para conocer el tuyo, deberás hacerte un test de audiometría con un especialista. Este se puede llevar a cabo ya sea en una clínica especializada en otorrinolaringología o en una tienda de audífonos con cabina insonorizada.
Audición leve o moderada: Tienda de audífonos baratos vs amplificadores de sonido digitales de venta online
Si el nivel de audición del paciente es leve o moderado (70-21 dB), la intervención quirúrgica se puede evitar y es muy posible que su especialista le autorice una clase de audífono abierto, el cual se adapta según la anatomía del paciente. Estos mejoran de forma significativa la calidad de vida del afectado y además se pueden encontrar en cualquier tienda de audífonos.
Por otro lado, a pesar de esta ventajosa solución, los asistentes de escucha digitales son otra alternativa aún más accesible y económica para personas con deficiencias auditivas moderadas.
Estos asistentes también se conocen como amplificadores de sonido digitales, pues su micro tecnología compensa los fallos auditivos del oído de forma automática, además de que incluyen la posibilidad de modular el volumen de escucha y el ruido ambiente. Son discretos y muy cómodos.
Contrariamente a una tienda de audífonos, estos pueden conseguirse en línea sin la autorización de un especialista.
Por último, te recordamos que si crees tener un problema auditivo, solicita un examen de audiometría antes de tomar cualquier tipo de decisión.